lunes, marzo 06, 2006

Borracho veo entre las luces de la noche,
como un milagro o como un pedacito de milagro,
escondida entre los empujones, las bromas, los cigarros,
tu sonrisa.
Y diría que no hay nada en el mundo mejor que tu sonrisa.
La borrachera cansa, la juerga, el ron ya no sabe a ron y la boca es un órgano insensible,
y me voy caminando hacia el coche, porque la noche cotidiana se ha acabado por ahora.
Y diría que sin tu sonrisa nada tendría sentido.