jueves, julio 30, 2009

Abisal

Durante la investigación del vacío se concluye
que dura
salpicado a veces de alambres dorados.
Queda en suspenso todo y no hay razón
para que el suspenso se suspenda
salvo esos alambres que tendemos
que tiendo para anclarme a ti a veces
intentando someter el sopor.
Así que en eso pienso, en gente que se aleja
y en pájaros que duermen.
Hasta que tiendes tú un alambre
lo anclas a tu cuero cabelludo, y otro,
y eres Medusa en el vacío, resplandeciente.

jueves, julio 16, 2009

Ni siquiera parpadear

Estos meses transcurren solamente
por aquella injusticia.
Y tú cierras los ojos
debatiéndote
entre ser la hermosura y abarcarla.
Como una fiera te distraes
con tiestos con flores con insectos viandantes
y te giras y catapultas tu iris
(y ya no quedan dudas)
y así empiezan asuntos como el del Vesubio.

martes, julio 14, 2009

Protesto

No estoy de acuerdo con que seas toda
de pura esmeralda.
Como si los milagros que acontecen
permitieran una huída digna.
No estoy de acuerdo en que al relamerte
llegue hasta aquí un clamor de libélulas
de puro añil.
Y con los restos de tu piel dorada
se hagan tus kamikazes
de puro mar.
Me presento: sigo con los ojos esa estela que dejas
cuando tôt la matin abandonas la almohada
dejandola empapada
de ti.

viernes, julio 10, 2009

Tambor tambor tambor

La pleamar expira y la última nube atenúa las sombras.
Cuatro gaviotas se aventuran a invadir las papeleras.
Yo busco el amparo de la resaca.
Solo hay un vaivén que me marea
y algas muertas y un hueso
como el que hay en algunas jaulas de pájaro
navegando.
Y ella posará aún más distraída
a la velocidad de la luz pensará en la palabra despacio
o en pelusas que habitan el amarillo y la noche (sus colores).
Ella tiene un corazón lleno de guerra.

martes, julio 07, 2009

Posado y fuga

Como una catacatarata o un gato que se cae
apareces a traición, sin previo aviso
mostrando el cuello herido.
Ya te han mordido y aunque te defendiste
llevas las magulladuras de corona
y posas. Eres como de cristal mientras posas.
No te acecho. Te miro. Porque quiero mirarte.
Y ordeno a los muebles de tu casa que te arropen.